Sobre el nombre de la calle hay claridad: al final, cerca de la bahía de las Ánimas, estaba la aguada de la Marina, un aljibe colonial de grandes proporciones donde se acumulaba el agua lluvia para proveerla a los barcos que atracaban en las inmediaciones.
Como calle tiene la disposición más curiosa del barrio pues comienza a mitad de la misma calzada de la calle del Pozo. Las separa solo una pared medianera entre el parqueadero del Dadis y la casa siguiente. Por el frente comienza en la calle Larga y hace una diagonal de 86 metros hasta la calle de las Chancletas para darle espacio a la plaza del Pozo, donde en efecto funcionaba en la Colonia un pozo de agua gorda, la que servía para oficios pero no para beber. Es la calle con el andén más ancho de Getsemaní (2,6 metros), un barrio donde los andenes suelen ser bastante angostos.
En la plaza del Pozo nació desde la Colonia uno de los núcleos de vecindad más fuertes del barrio. Las fiestas de la plaza se celebraban entre la Navidad y la fiesta de Reyes. Eran la época más esperada del año por los vecinos, que hacía mediados del siglo pasado tendían a ser liberales en política y rivalizaban con los partidarios conservadores del sector de Chambacú.
<p><span style="font-weight: 400;">Sede del Departamento Administrativo Distrital de Salud (DADIS).</span></p>
<p><span style="font-weight: 400;">Sede del Departamento Administrativo Distrital de Salud (DADIS).</span></p>
<p><span style="font-weight: 400;">Sede del Departamento Administrativo Distrital de Salud (DADIS).</span></p>