Al parecer no solo quedarán los recuerdos de actor Will Smith caminando por las calles de Getsemaní durante el rodaje de la película Gemini Man o las imágenes capturadas por los vecinos del barrio con la estrella de cine o incluso, la misma película. La productora Dynamo, encargada de la producción de este filme, entregó como donación al barrio las máquinas para la construcción de un parque. Ahí comenzó un camino que en unos pocos meses dará sus resultados.
“En Dynamo pensaron que lo mejor era ofrecer algo que impactara a toda la comunidad, diferente a lo que se venía realizando con otras productoras, porque solo se beneficiaba a las calles donde se rodaba dándole un pequeño reconocimiento a la gente”, asegura Davinson Gaviria, presidente de la Junta de Acción Comunal del barrio.
“En eso coincidimos y ellos nos donaron las máquinas, avaluadas en alrededor de 20 millones de pesos. Luego de recibida esta donación tocamos las puertas en el Proyecto San Francisco, para que nos apoyara con el suministro de materiales y la Escuela Taller con la mano de obra”, cuenta Gaviria.
“La idea es empezar obras a mediados de junio y entregarle a la comunidad el parque dos o tres semanas después, que es lo que se tiene planeado”, asegura Gaviria.
“La Escuela taller se vinculó porque estábamos buscando patrocinadores. El proyecto San Francisco aportó parte de la financiación, pero no podía cubrir todos los gastos. Pensamos que la Escuela Taller podía aportar la mano de obra con sus aprendices. Por supuesto, la Junta de Acción Comunal también dará su aporte suministrando hidratación y refrigerios a los jóvenes que estén trabajando. Eso, más la parte eléctrica lo haremos con recursos que hemos captado por rodaje de películas, salseros, bingos y rifas”, dice Davinson, quien precisa que por ninguno de estos aspectos la junta ha recibido dinero para sí.
La zona escogida para ubicar este nuevo parque es la avenida el Pedregal, que además de tradicional ha sido un escenario deportivo por excelencia para los habitantes del barrio. Exactamente, el parque será construido entre el baluarte San José y el de la Virgen. “Quisimos recuperar esta zona porque de cierta forma tiene muchos años de no ser utilizada de manera adecuada”, explica Davinson.
La entrega de las máquinas se realizó en abril de 2018. “Nos dieron la licencia en diciembre, unos ocho meses después. Ahora estamos en el trámite de firmar el contrato con la fiducia, quienes serán los encargados de entregar el dinero otorgado por San Francisco. En cuanto a Escuela Taller, en abril de este año, firmamos contrato”, dice Gaviria.
Se lo pensó un getsemanicense
Camilo Polo Meléndez, joven getsemanicense y arquitecto fue el encargado de liderar el proceso de diseño de esta obra. “Pensamos en un parque biosaludable con áreas de juegos para niños, pero también en donde se pudiera practicar deportes, baile o clases de zumba. Quisimos darle un uso práctico y óptimo para que la comunidad pueda disfrutarlo”, dice Camilo.
“El parque está dividido en tres zonas: una con cinco máquinas biosaludables y la reinstalación de las barras que tenemos ahí. Después está una zona para practicar baile, con un tapete de grama sintética que se pueda mantener y sea durable. Finalmente, estará la zona infantil que trae tobogán, escaleras, pasamanos, columpio y un sube y baja”, explica Camilo.
“En la Escuela Taller nos hablaron de unos lineamientos en la zona, porque ellos son los que manejan toda la parte de fortificaciones, así que también eran los primeros a los que había que consultarles”, dice Camilo.
“Nosotros estamos en pie de lucha con lo que son nuestras tradiciones. Esa zona del Pedregal siempre ha tenido una movida deportiva por el tema de la bola de trapo. Eso es el complemento idóneo para todo lo que pensamos hacer en esa zona”, cuenta Polo.
“Desde la rampa del baluarte San José, hasta la Virgencita son unos 170 metros, que también va a tener una parte de ornamentación y de iluminación para que la práctica se extienda hasta la noche porque hay muchos jóvenes que utilizan esas horas del día para realizar sus actividades extracurriculares”, dice.
“Este es el primer parque de este tipo en el Centro Histórico. Será un precedente para los espacios residuales y zonas verdes de las murallas que poco o nada se utilizan”, asegura Polo.
"Sin duda esto será una gran zona de recreación. Estamos pensando que para que sea sostenible tenemos que generar recursos alrededor de eso. Por ejemplo: tenemos la idea de comprar un brinca-brinca y eso daría para que una persona que esté pendiente. Porque de una u otra forma hay que realizarle mantenimiento. No pensamos en solo instalarlo y dejarlo ahí. La idea es que eso perdure en el tiempo y que no caiga en abandono", explica Davinson Gaviria.
"Nos proyectamos en aprovechar más esa zona del Pedregal con amoblamiento urbano y en realidad sí se puede. Ahí hay un profesor que practica con fútbol con niños. La idea es armar un circuito y anexarlo a este nuevo paso peatonal", cuenta Camilo.
“Queremos que todo el barrio se apropie de este espacio. Será una obra que también vincularía a las personas que están de tránsito, a extranjeros y a la comunidad en general. Reconocemos que el proceso ha sido lento, pero seguro. Nos enorgullecemos como getsemanisense de poder entregar este parque”, remata Davinson.